Por
Iraida Josefina Villasmil
Legisladora Presidente del Consejo Legislativo del Estado Zulia.
"Dicho y hecho" no se trata de un simple eslogan para fines publicitarios. Dicho y
hecho es una acción de gobierno que va mucho más allá de ese juego de tres
palabras, que dicho sea de paso, es una excelente creación.
Dicho
y hecho tiene que ver con la palabra empeñada del Gobernador Manuel Rosales
durante su campaña electoral, en la cual ofreció al pueblo zuliano un programa
de acción gubernamental de relevancia que no era ninguna entelequia, sino un
conjunto de acciones de gobierno totalmente realizables. Y más aún en manos de
un hombre que trabaja sin descanso,
promoviendo, inspeccionando y en búsqueda de buenos resultados, siempre en función del
pueblo zuliano. A vuelo rasante podemos mencionar como ejemplo el cumplimiento de propósitos en materia de
programas sociales y temas de interés en beneficio de los emprendimientos.
Manuel
Rosales sabe muy bien donde está parado. El líder indiscutible del Zulia
mantiene la disposición de trabajar con todos los niveles de gobierno con la
finalidad de alcanzar los objetivos propuestos
para los habitantes de esta noble tierra.
Rosales
está claro que había que trabajar muy duro por el relanzamiento del Zulia para
lograr nuevamente el estado productivo y de referencia nacional que siempre fue
y que le permitió constituirse en el primer
estado del país por su diversidad productiva y auge petrolero y
agropecuario.
Prometió
su Plan de emergencia P95.0 para
desarrollarlo en los primeros tres meses de su gestión. Los resultados ya están
a la vista. Recuperación de la infraestructura hospitalaria y abastecimiento de
las emergencias, reasfaltado de avenidas
de la ciudad, de urbanizaciones y barriadas. La gente comienza a ver un estilo
de administración pública con una visión de desarrollo y productividad en todos
los ámbitos de la sociedad. Dicho y
hecho.
Legisladora Presidente del Consejo Legislativo del Estado Zulia.
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